Recordamos Chernobyl 35 años después del mayor accidente nuclear de la historia, aquella noche de abril de 1986 que quedará en nuestro recuerdo para los restos
Con una radiación aún muy elevada y con el nuevo sarcófago totalmente terminado, la naturaleza y la vida se abre paso poco a poco, entre otras cosas, por la bajada de la actividad a la mitad de la mayoría de los elementos radiactivos expulsados con una vida media de unos 30 años.